Osamu Kogure pasa sus días cerca de la pobreza, pero sigue tomando trabajos extraños. Después de ser forzado por un compañero de trabajo sin escrúpulos que disfruta manipular a las personas, decide cometer un robo con una mujer. El robo sale mal y Osamu pierde un brazo. Ahora, ese brazo cobrará vida, convirtiéndose en algo monstruoso.